¡dale candela, maría!

ensalada de brócoli, manzana y rúcula

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Cuando era pequeña no quería probar las alcachofas. No tenía nada en contra, pero no me parecían apetitosas (bonitas en lenguaje infantil). Y eso que mi madre se esmeraba en prepararlas bien: fritas con jamón, cocidas con mayonesa y atún... Los razonamientos de mis padres eran buenos, y largos. No había manera de convencerme.




Con el brócoli me pasa ahora algo por el estilo. Y eso que esta vez me gusta la forma de arbolito. La cosa es que siempre acabo comprándolo, porque me autoconvenzo de sus propiedades. Pero no hay vez que no quede un resto en la nevera, día tras día, esperando tristemente en un tupper que alguien se lo coma. Hasta que  llegó el día del ultimatum: no más brócoli abandonado. No señor, hay que dar ejemplo, como persona adulta que soy. Bueno, eso y que me da vergüenza ver a mis sobris Adrián y Alicia (de 7 y 6 años) cómo se lo comen de tan buena gana y pensar que yo no he aprendido a comerlo.

Por eso, esta receta va especialmente dedicada a ellos, que me enseñan cada día cosas nuevas. Yo espero eneñarles que los pimientos están riquísimos y que les acabará gustando el sabor, como a mí me gustará el brócoli.








La receta
Buscando por internet recetas de brócoli me encontré con esta de Joythebaker. Queda muy rica con el aliño agridulce. Y la manzana le aporta una textura diferente. ¡A ver a quién convenzo para probarlo!

Ingredientes (2 personas)
1 pieza de brócoli
1 manzana
1/2 bolsa de rúcula y hojas de ensalada variadas
Un puñado de pipas de girasol

Para el aliño
1 cucharadita de mostaza en grano
1 cucharada de miel
1 cucharada de aceite de oliva
1 cucharada de vinagre de manzana
Sal y pimienta al gusto


Preparación
1. Se trocea el brócoli por los tallos y se corta el tallo central en palitos. Se pone a cocer en una olla con un poco de agua a fuego lento. Se tapa y remueve de vez en cuando. Cuando está cocido, se aparta y se deja enfriar.
2. Se ponen las pipas de girasol a tostar en una sartén con una pizca de sal y se apartan.
3. En un bol grande, se mezclan los ingredientes del aliño y se remueven bien.
4. Se añade el brócoli, una manzana cortada fina, las pipas y la rúcula y hojas de ensalada al gusto. Se remueve todo y ¡lista para comer!


Mis trucos
El brócoli al dente (no demasiado tierno) le aportará más sabor y conservará más propiedades.

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